EL DOTOR

Sin C

Los dos hijos de Marina – de uno y dos años – quedaron como ella. ¡Pailas! Un “vivo” los tumbó. La habitante del barrio Palermo, se hizo liquidar las cesantías en la fábrica de confecciones para guardar sus madrugadas en La Financiera Furatena, pero, un golpe a sus ilusiones noqueó su tranquilidad. El dueño del banco Nacional, y otras 52 empresas (incluida Fabricato) sorpresivamente se quebró. Lo sorpresivo a nadie sorprendió. ¡Y la gran prensa se calló! Es tan frecuente este jueguito que nos acostumbraron a meternos los dedos a la boca infinidad de veces.

  • ¿Cómo así? Me preguntarás.

En 1982 se supo lo que se sospechaba. Se desnudó otro escándalo en Medellín (y Colombia) cuando todos los estafados se enteraron que sus ahorritos se evaporaron, dizque – repito – dizque porque se quebró el propietario de Furatena. Mejor dicho, se robó $7.695.000, y como en ese momento no había redes sociales, ¡la gran prensa no advirtió!

  • ¿Y quién fue ese bellaco? Me volverás a interrogar.

Félix Correa Maya.  Un tipo que aprendió de su familia banquera cómo enriquecerse sin moverse del sofá.  Él es otro de esos a quienes llamamos “dotor” (sin C) que tomó la platica de otros y se la mecatío, dejando a 120.000 ahorradores en la incertidumbre, y 18.000 familias cabizbajas.

  • “¡Ome Héctor, primero se acaba la aguamasa!”. Me dirás.
  • ¡No! Porque cuando se confía la duda no existe. Te respondo.

El presidente del Grupo Colombia fue recluido en La Modelo en 1982, quedando libre en 1990 porque la investigación no avanzaba. En Colombia, el abogado tramposo utiliza trucos para que le apliquen la preclusión a su cliente, evitando la condena. En 1995 fue recapturado por presión de los gringos: sus fraudes llegaron hasta el Florida Bank, pero, otra vez, la magia apareció. El Tribunal Superior de Bogotá archivó el proceso después de 8 años por vencimiento de termino. Dos palabras tan actuales que nunca perderán vigencia mientras la corrupción gobierne. El 13 de julio de 2005 murió sin dársele nada. ¿Y las víctimas? Bien, gracias, dirá la gran prensa que no cuenta el cuento como lo debería contar.

Después de tanta decepción, en Aranjuez – nororiente de la ciudad – Marina renunció a todo al ver a sus hijos alimentarse con hambre. ¡Hijueputa!, gritaba, mientras sus ojos se ahogaban de impotencia al oler la hediondez del cinismo.

Enero 13 de 2024

pensamientos de 8 \"EL DOTOR\"

  1. Félix Correa, gran hampón. Como otros de estos breñales, estafadores, tumbadores. Y siempre lleva del bulto el pobre, carne de cañón para todas las miserias y objetivo de todos los que detentan el poder. Ah, ¿y la justicia?, ja, bien, gracias.

  2. “ Me preocupa solo una cosa profesor Barrientos …. Que el Dotorcito Correa esté en el mismo patio con el amigo Judas , que tengan celulares en la mano y les de por crear una pirámide desde allá…. Gran crónica , y la verdad, se acaba mas fácil, la aguamasa que los marranos”

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