Tarjeta roja

Cuando todos perdemos

Ese día el país entendió que un partido de fútbol acaba cuando la metralla habla. Y no fue un pito, sino nueve tiros los que liquidaron el campeonato que lideraba el Unión Magdalena: ante tanta incertidumbre la ciudad no se achicopaló, y siguió creyendo que de ésta también se pararía.

• ¿Qué pasó Héctor, con ese preámbulo asustador?, me preguntarás.

En Medellín, en el centro del Centro, en la noche del miércoles 15 de noviembre de 1989, asesinaron al árbitro que esa noche había sido Juez de Línea en el Atanasio, en el partido de vuelta entre el Deportivo Independiente Medellín y el América. Los hinchas del “poderoso” soñaban estar en las finales del torneo de ese año, para celebrar bailando el éxito musical del momento, La Lambada. ¡Claro! opinaban los aficionados aún en el estadio; “si el DIM no hubiese empatado”.

• Y si no fue el finado, el árbitro de ese partido, entonces ¿qué pasó?

Álvaro Ortega Madero (El Roble – Bolívar) había sido la máxima autoridad en el partido de ida, jugado en Cali el 26 de octubre, entre los mismos rivales. Faltando poco para el cumplimiento del tiempo reglamentario, el Medellín hizo un gol, Ortega lo anuló, y América ganó. Como Pablo Escobar también era apostador, salió perjudicado con esta decisión.

Pero previo a las instancias semifinales del campeonato del fútbol colombiano, estuvo secuestrado veinticuatro horas, en nuestra ciudad, el árbitro antioqueño Armando Pérez, con quien enviaron un mensaje: “El que pite mal, lo borramos”, cumpliendo dicha sentencia esa noche de miércoles. Y, ante la ausencia de garantías para preservar la vida, el Gobierno Nacional decide el 22 de noviembre suspender el torneo profesional por primera vez en su historia. Inédita solución ante la guerra que le declaró el capo al Estado colombiano, así que, por primera vez no hubo campeón desde que comenzó la competencia en 1948, cuando Santa fe ganó la primera estrella.

Medellín sobrevivió a esa tarjeta roja que no logró expulsar su creencia en el olor de mejores días, siendo éste el aroma preferido de los casi tres millones de personas, que hacemos de esta tierrita, el mejor vividero del planeta, al volvernos expertos en gambetear dificultades.

Noviembre 17 de 2022